Mientras la situación en Nueva York se vuelve cada vez más caótica, Larry va a la casa de su madre para encontrarla extremadamente enferma.

En la cárcel, Nick está tratando de hacer su trabajo, cuidando a los tipos que están encerrados, a pesar de que se burlan de él con crueldad. El médico aparece, le da malas noticias y hace una sugerencia que a Nick le sorprende

"La cosas se desmoronan" como dice el Poema de Yeats. Cuando los reporteros que intentan revelar la verdad se convierten en víctimas de un brutal ataque, queda claro hasta dónde llegará el gobierno para mantener en secreto la mortal gripe.

El Capitán Viajes parece ser real. Es el nombre metafórico que se la ha dado al extraño virus. Pero los funcionarios públicos siguen negando que haya una epidemia. Mientras tanto, Poke y Lloyd intentan robar una tienda.

Stu Redman se impacienta cada vez más en la cuarentena y le juega una mala pasada a Dietz quien viene a discutir la situación.

Nick Andros se despierta en prisión después de que un médico local lo encuentra en la calle, y casi lo atropella. Nick se las arregla para hacerse entender y decirle al sheriff quien lo golpeó.

Poco después del comienzo de la epidemia, Nick Andros, sordomudo, es golpeado por unos matones locales mientras camina por la calle de noche. Resulta levemente herido en el asalto y sueña con la madre Abigail quien le pide que vaya a verla a Nebraska.

Mientras Frannie y su padre tienen una charla de corazón a corazón, Stu Redman se está cansando de estar en cuarentena sin ninguna información y exige hablar con alguien que pueda explicar lo que está pasando.

Stuart Redman es retenido por la fuerza en un centro especializado en Vermont, pero demuestra ser inmune al virus. Harold está enamorado de Francis y se dedica a impresionarla con un poema propio y publicado en una revista local.

Larry Underwood es un joven cantante pop, algo narciso, que acaba de lanzar su primer sencillo Baby, Can You Dig Your Man?. Se endeuda mucho mientras vive en Los Ángeles y viaja a Nueva York para esconderse, con el pretexto de visitar a su amada, pero profundamente decepcionada madre.